El presidente anunció el despido de la excanciller tras votar en la ONU a favor de Cuba, en contradicción con los intereses de Estados Unidos e Israel. Según el mandatario, fue “un error imperdonable” que costó el puesto a la exfuncionaria en solo 30 minutos. En una entrevista con su pareja, Amalia “Yuyito” González, expresó su indignación y adelantó que los demás responsables de la decisión en Cancillería enfrentarán sanciones.
El presidente arremetió contra los diplomáticos de carrera, acusándolos de vivir en una “burbuja burocrática y parasitaria” y de adherir a la agenda internacional que va en contra de las libertades individuales. Los desafió a ganar elecciones si desean influir en las políticas del país y subrayó que la política exterior debe seguir la línea presidencial. Con firmeza, el jefe de Estado declaró: “Estoy para echar a todos los involucrados; son traidores a la Patria”.
El mandatario recordó los pilares de su plataforma de gobierno: la economía con el ajuste fiscal y dolarización; la lucha contra la inseguridad y la política internacional alineada con aliados estratégicos. Para él, el reciente voto en la ONU contradijo abiertamente estos principios, especialmente en la relación cercana que el país debe mantener con EE.UU. e Israel.